"El Estudio": Seth Rogen nos lleva detrás de cámaras con humor y corazón
- Juan E. Fernández, Juanette
- 53min
- 3 Min. de lectura

Hola queridos lectores, espero tengan una estupenda semana. Yo pasé un gran fin de semana pues me topé con El Estudio una joyita de Apple TV, protagonizada por Seth
Rogen. Desde el primer episodio me tuvo enganchado y ya entiendo por qué la
renovaron para una segunda temporada.
La serie cuenta la historia de Matt Remick, interpretado por Seth Rogen, quien acaba de ser nombrado director de Continental Studios. Matt es un verdadero cinéfilo que llega al puesto lleno de ilusiones, pero pronto descubre que dirigir un estudio cinematográfico es mucho más complicado de lo que imaginaba. Entre presiones corporativas, egos de artistas y la constante necesidad de generar ganancias, el pobre Matt se encuentra navegando en aguas muy turbulentas.
Lo que más me gustó de la serie es cómo logra equilibrar el humor con momentos más reflexivos. Matt es ese tipo de personaje que todos conocemos: quiere hacer lo correcto
y caerles bien a todos, pero constantemente se mete en situaciones incómodas. Seth Rogen hace un trabajo fantástico mostrando las contradicciones de alguien que ama profundamente el cine, pero tiene que lidiar con las realidades del negocio.
El resto del elenco también es excelente. Podemos ver por ejemplo a Catherine O'Hara, quien hace de la antigua jefa de Matt, otro trabajo para destacar es el de Kathryn Hahn quien personifica a una ejecutiva de marketing que roba cada escena en la que aparece. Ike Barinholtz y Chase Sui Wonders completan el equipo principal con actuaciones muy naturales que hacen que realmente sientas que estás viendo a un grupo de colegas trabajando juntos.
Pero lo que realmente hace especial a El Estudio es su impresionante lista de invitados. Martin Scorsese, Charlize Theron, Zac Efron, Ice Cube, Steve Buscemi, Paul Dano y muchos más aparecen haciendo versiones divertidas de ellos mismos. No es solo un desfile de celebridades por el gusto de hacerlo; cada cameo está bien integrado a la historia y aporta algo genuino a la narrativa.
La serie está filmada de una manera muy interesante, con tomas largas que te hacen sentir como si estuvieras caminando por los pasillos del estudio junto a los personajes. Hay un episodio completo que prácticamente es una sola toma y queda increíblemente bien logrado. Esta técnica le da un ritmo muy dinámico a la serie y hace que te sientas parte del caos creativo que viven los protagonistas.
El humor es inteligente pero accesible. No necesitas ser experto en la industria cinematográfica para entender los chistes, aunque si conoces del tema vas a captar
referencias adicionales que están padrísimas. La serie logra retratar las tensiones entre la
creatividad artística y las demandas comerciales de una manera que es tanto divertida
como genuina.
Seth Rogen y Evan Goldberg, junto con los cocreadores Peter Huyck, Alex Gregory y
Frida Pérez, han creado algo que se siente auténtico. Se nota que conocen bien el mundo
que están retratando y que tienen tanto cariño como frustración hacia él. La serie nunca
se siente cruel o despiadada; más bien tiene esa calidad de alguien que está contando
historias divertidas sobre su lugar de trabajo.
El Estudio es perfecta para esos momentos cuando quieres algo ligero pero inteligente. Es el tipo de serie que puedes ver después de un día pesado de trabajo y que te va a hacer reír sin hacerte sentir que estás perdiendo el tiempo. Con episodios de alrededor de media hora, es perfecta para maratonear o para ver de a poquito.
Si te gustaron series como Ted Lasso por su mezcla de humor y corazón, o The Bear por su retrato del caos laboral, probablemente El Estudio te va a encantar. Es una serie que celebra la pasión por contar historias mientras reconoce las complejidades del mundo del entretenimiento.
Como ya les conté El Estudio puede verse en la plataforma Apple TV+ y yo ya estoy esperando ansiosamente la segunda temporada.