Yeison Pérez, de 31 años de edad, nacido en La Guaira, encontró en su pasión por la pintura una herramienta para mostrar a otros el duro camino de la migración y los sacrificios que hacen quienes deciden huir de su país en busca de un mejor futuro.
Yeison emigró a Chicago (Estados Unidos) en 2023. Recientemente elaboró una serie de pinturas que describen cómo fue su travesía migratoria. Esto pudo hacerlo gracias a la ayuda de la Iglesia Comunitaria Starting Poin, el mismo lugar donde pudo exponer sus obras.
“Siempre he pintado. Plasmar mis ideas por medio del arte siempre me ha gustado, por eso decidí llevar a cabo este proyecto por medio de la pintura, porque me apasiona (…) Aunque inicialmente no tenía pensado retratar la ruta migratoria, lo hice porque quería hablar un poco de la situación de algunos migrantes y contar ese lado que muchas personas no comentan y conocen”, cuenta en entrevista con la Voz de América.
La elaboración de las obras que componen su exposición tardó alrededor de dos meses. El venezolano dice que se siente honrado por la receptividad que ha recibido por las pinturas y afirma que mucha gente le ha escrito para decirle que se siente reflejada en sus cuadros.
En algunos de sus cuadros más destacados, Pérez retrata la selva del Darién, entre Panamá y Colombia, utilizada por cientos de migrantes en su travesía rumbo a Estados Unidos.
También refleja la despedida de una madre con un hijo que está a punto de abandonar el país y a un migrante a punto de subirse al tren “La Bestia” en México, el cual muchos utilizan para acortar el camino hacia la frontera.
“Mi objetivo era visibilizar un poco a los migrantes que llegan a Estados Unidos para salir adelante, para también picar un poco esas noticias negativas que salen sobre la situación”, menciona.
“Para ser migrante hay que ser valiente, paciente, cauteloso, decidido y hay que tener mucha pero mucha fe porque hay momentos donde tú andas solo con Dios en la mente para que te siga guiando en el camino. Yo nunca pensé que sería un migrante”, confiesa.
Más de $ 500 millones al año en impuestos aportan migrantes venezolanos a Colombia
Los migrantes venezolanos que están en Colombia aportan en impuestos al país más de 500 millones de dólares al año, es decir, 1,9 billones de pesos. Sin embargo, si se aprovechara todo su potencial, permitiéndoles insertarse laboralmente de una forma acorde a su formación profesional, este aporte podría superar los 800 millones de dólares, unos 3,1 billones de pesos al año.
Estas son las estimaciones que hizo el Estudio de Impacto Fiscal de la migración venezolana en Colombia: realidad vs potencial, presentado el pasado lunes 22 de abril por la Fundación Konrad-Adenauer Stiftung, Ideas para la Paz, la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) y CAVEX a través de Equilibrium Social Development Consulting,
El informe, realizado entre agosto y noviembre de 2023, evaluó las condiciones económicas en las que se encuentran los migrantes venezolanos que están en el país, especialmente en materia laboral.
Con base en más de 790 encuestas, 4 grupos focales a población migrante y 13 entrevistas semi estructuradas al sector privado inversionista venezolano y gremios, se encontró que la principal ocupación de los migrantes está en los servicios de alimentos y bebidas (17,82 %) seguidos del comercio al por menor (15,4 %).
Uno de los principales hallazgos es que sólo 18,3% de los entrevistados ejerce su profesión, pues en más de 61,6% de los casos no han podido convalidar su título o por los costos que implica o porque no pudieron salir de Venezuela con la documentación que se requiera.
Hay además un alto nivel de informalidad: en el caso de quienes son empleados dependientes, la informalidad asciende a 71,63%, mientras que quienes trabajan de manera independiente están en la informalidad en 97,71% de los casos.
Para las mujeres, es aún mayor, pues 79,88% de las empleadas tienen una relación laboral informal, mientras que las independientes tienen una informalidad de 97,76%.
Esto es aún más significativo, si se tiene en cuenta que un trabajador con contrato formal, según los cálculos del estudio, puede obtener un ingreso promedio equivalente al doble del trabajador no formal. Mientras el formal puede tener ingresos mensuales de alrededor de $1.500.000, el informal está por debajo de los $700.000, que no alcanza a ser un salario mínimo.
En el estudio se tuvo en cuenta que, de los más de 2’800.000 migrantes venezolanos que hay en Colombia, 62,64% está en edad de trabajar, 77% de estos últimos es población económicamente activa y de estos, 95,76% están ocupados, 26,88% como dependientes y 73,12% como independientes.
Con información de migravenezuela.com
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En su gira por Chile, el cantautor de música llanera se reencontró con Kike tras 23 años sin verlo. Kike es zuliano y residente con su familia en Rancagua. Recibió la inesperada visita de su ídolo, quien llegó disfrazado de Buzz Ligthyear y la cara de alegría y sorpresa de Kike merece ver el video hasta el final.