¡No te lo pierdas! El 13 de diciembre solo observa el cielo

Hasta con 150 meteoros por hora y sin la interferencia de la luna, las Gemínidas, una de las lluvias de meteoros más fiables y espectaculares del calendario astronómico Foto: pablosky.mx

Como si el universo decidiera despedirse de 2025 con fuegos artificiales cósmicos, la lluvia de meteoros Gemínidas alcanzará su punto máximo durante las noches del 13 y 14 de diciembre, cuando hasta 150 meteoros por hora atravesarán el cielo nocturno como pinceladas fugaces de luz. Lo que hace aún más especial esta edición de las Gemínidas no es solo su intensidad, sino las condiciones casi ideales con las que nos obsequia el calendario lunar.

Bajo un cielo sin luna (con apenas una franja del 28% de iluminación que aparecerá hacia las 2:30 de la madrugada, cuando la constelación de Géminis se alza en su cénit) los observadores del hemisferio norte disfrutarán de un telón oscuro y despejado, perfecto para no perderse ni un solo destello.

Orígenes

Esta danza de luces tiene un origen tan singular como fascinante. A diferencia de la mayoría de lluvias de meteoros, que provienen de cometas helados, las Gemínidas surgen del rastro polvoriento dejado por un asteroide rocoso, el 3200 Faetón, una rareza en el mundo astronómico. Este objeto de 5.8 km de diámetro orbita el Sol cada 1,4 años y, al hacerlo, libera fragmentos sólidos que penetran nuestra atmósfera a velocidades altas pero no tan extremas, permitiendo que estos meteoros sean más brillantes, lentos y, muchas veces, coloridos.

Cómo verlo

Los tonos verdes, anaranjados y azulados que a veces acompañan su estela no son casualidad: son fruto de la combustión de minerales como sodio, magnesio o calcio presentes en el cuerpo del meteorito. Este fenómeno convierte a las Gemínidas en una de las lluvias más fotogénicas y espectaculares del año.

Y lo mejor: no hace falta equipo especializado para disfrutarlo. Bastará con encontrar un lugar alejado de la contaminación lumínica, apagar las pantallas y permitir que los ojos se acostumbren a la oscuridad durante unos 20 minutos. Aunque el punto radiante se encuentra entre las estrellas Cástor y Pólux de la constelación de Géminis, los meteoros pueden cruzar cualquier zona del cielo, por lo que mirar hacia arriba con paciencia y constancia será la mejor estrategia.

La actividad de esta lluvia comenzó el 4 de diciembre y se extenderá hasta el día 17, aunque el verdadero punto álgido se vivirá durante la madrugada del 13 al 14. Las horas posteriores a las 10 p.m. ya ofrecen buenas oportunidades de observación, pero será entrada la madrugada cuando los cielos se llenen de estos viajeros luminosos, según recomienda la American Meteor Society.

Las Úrsidas

Pero el espectáculo celeste no termina con las Gemínidas. Como si se tratara de un bis estelar, las Úrsidas entrarán en escena justo cuando las primeras comiencen a desvanecerse. Aunque considerablemente más modestas (con un promedio de 10 meteoros por hora), estas estrellas fugaces tendrán la ventaja de contar con cielos completamente oscuros, gracias a la coincidencia con la luna nueva el 21 de diciembre.

Así, diciembre se transforma en el mes más generoso del firmamento. Dos lluvias consecutivas, una majestuosa y brillante; la otra un poco más discreta, cierran el año astronómico con una invitación a mirar hacia arriba. Bajo cielos limpios y sin luna, alejados del ruido urbano y envueltos por el frío invernal, quizás nos reencontremos con el cielo más espectacular del año. Con información de nationalgeographic.com