La apuesta de la Unión Europea (UE) por escuchar las preocupaciones en materia de defensa de una cincuentena de socios internacionales con los que comparte valores y su proyección como proveedor de seguridad en el mundo centraron este martes 21 de marzo la primera edición del Foro Schuman.
“Está claro que los aquí presentes apoyan el orden internacional basado en reglas, con la ONU en su centro. Vamos a seguir trabajando en el centro de ese sistema internacional, tenemos que protegerlo, defenderlo y hacerlo más fuerte”, indicó al término de la conferencia el alto representante de la UE para Asuntos Exteriores, Josep Borrell.
Impulsado por Borrell, el Foro Schuman nace con vocación de celebrarse cada dos años para debatir cómo abordar de forma conjunta retos y amenazas comunes.
“Compartimos los mismos valores, aunque quizá no las mismas prioridades, es posible. Así que vamos a ser humildes, flexibles y pragmáticos y a tener en consideración las prioridades de todos nuestros socios”, afirmó Borrell, quien animó a los participantes a expresar “sus expectativas, sus puntos de vista, sus preocupaciones” y a la UE a ponerse "en modo escucha".
El jefe de la diplomacia comunitaria dejó claro que la cooperación “es más importante que nunca”, ya que “ningún país actuando solo puede afrontar retos” como el retorno de la “política del poder”, los regímenes autoritarios o la mezcla de amenazas convencionales e híbridas.
Proveedor de seguridad
Borrell expuso los avances de la UE en integración de su política de defensa un año después de la entrada en vigor de la “Brújula Estratégica”, el plan de la Unión para ganar autonomía y contribuir a convertirla en un proveedor mundial de seguridad en los próximos años, aprobado solo un mes después de la “brutal” agresión rusa a Ucrania, recordó, reseña swissinfo
Reconoció que las misiones civiles y militares de la UE deben ser “más eficaces” y centrarse no solo en la formación de fuerzas de seguridad de países socios sino también en la provisión de equipación.
“Tenemos los hombres, pero no los medios”, reconoció un representante de la Unión Africana, quien abogó por que la UE continúe por “la vía de la capacitación” y de los apoyos que ofrece a través del Fondo Europeo de Apoyo a la Paz (FEAP).
Nutrido de aportaciones de los Estados miembros, el FEAP ya ha permitido financiar armas para que Ucrania se defienda de la invasión rusa con 3.600 millones de euros.
"Debemos permitir que el terrorismo no llegue al Golfo de Guinea. Para ello hay que adiestrar a los distintos ejércitos de la región, hay que equiparlos, hay que adiestrarlos, hay que dotarles con el material militar necesario", dijo por su parte el ministro de Defensa de Níger, Alkassoum Indatou, y en este sentido recordó la reciente misión de asociación militar que la UE creó en diciembre con ese país.
“El esfuerzo que los europeos están haciendo en Ucrania ha cambiado nuestro perfil, nuestra marca. Europa es vista diferentemente”, consideró Borrell, quien destacó que otros socios “quieren que hagamos por ellos lo que hemos hecho por Ucrania” y proporcionarles el mismo tipo de respaldo con esa “rapidez”.
Para Borrell, “es una petición que tiene que ser respondida”.
Multilateralismo
La necesidad de “adelantarse” a los conflictos mediante la prevención fue otro de los principios que más subrayaron los participantes.
“Es esencial poder compartir información y también inteligencia con países con los que no siempre se comparten exactamente los mismos puntos de vista, pero países que a menudo comparten los mismos intereses”, recalcó la ministra neerlandesa de Defensa, Kajsa Ollongren, en una de las mesas redondas de la conferencia.
En esa misma mesa, la ministra española de Defensa, Margarita Robles, destacó la importancia de atender al flanco sur pese a la inmediatez que supone la guerra en Ucrania, en suelo europeo, y avanzó que cuando España ejerza en el segundo semestre del año la presidencia rotatoria del Consejo de la UE, África será una de sus prioridades en materia de seguridad.
La necesidad de mayor intercambio de información también se hizo patente por los participantes en ámbitos como el medio digital, mientras se producen “cada vez más ciberataques”, recordó Borrell, quien defendió asimismo más ejercicios conjuntos con socios internacionales y combatir la desinformación.
El espacio y el mar están igualmente en el punto de mira de la UE, que debe trabajar con sus socios para contribuir a que sean espacios seguros y su uso redunde en el beneficio de todos, comentó Robles.
“Las asociaciones nos hacen más fuertes. No es dependencia, es fuerza”, concluyó Borrell, quien abogó por que la UE sea “un socio más fuerte y valioso dentro de la OTAN, pero también con el resto del mundo” que quiera contribuir a más paz y prosperidad.
Borrell confió en celebrar el próximo Foro Schuman “el año próximo”, antes del final de su mandato.