Musk "decepcionado" se despidió de su cargo en el gobierno de Trump
- yamileinforme21
- hace 2 dĆas
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Elon Musk criticó duramente la emblemĆ”tica legislación de polĆtica interior del presidente Donald Trump, afirmando que aumentarĆa el dĆ©ficit nacional. Se quejó ante funcionarios del gobierno de un lucrativo acuerdo que se adjudicó a una empresa rival para construir un centro de datos de inteligencia artificial en Medio Oriente. Y aĆŗn no ha cumplido una promesa de donar 100 millones de dólares a la operación polĆtica de Trump.
Musk, quien en su dĆa se autodenominó el āprimer amigoā del presidente, ahora opera a cierta distancia de Trump, y dice que dejarĆ” su trabajo en el gobierno para dedicar mĆ”s tiempo a sus empresas. Musk sigue manteniendo buenas relaciones con Trump, segĆŗn funcionarios de la Casa Blanca. Pero tambiĆ©n ha dejado claro que estĆ” desilusionado con Washington y frustrado por los obstĆ”culos que encontró al trastocar la burocracia federal, lo que plantea dudas sobre la solidez de la alianza entre el presidente y el hombre mĆ”s rico del mundo.
Musk fue el mayor inversionista polĆtico en las elecciones de 2024, y este aƱo comunicó a los asesores de Trump que donarĆa 100 millones de dólares a grupos controlados por el equipo del presidente antes de las elecciones legislativas de 2026. Hasta esta semana, el dinero aĆŗn no ha llegado, segĆŗn varias personas familiarizadas con el asunto, que hablaron bajo condición de anonimato para describir la dinĆ”mica entre bastidores.
Musk no respondió a la solicitud de comentarios. El miĆ©rcoles por la noche, en una publicación en X, su plataforma de redes sociales, por primera vez confirmó oficialmente que su etapa como empleado del gobierno llegaba a su fin y agradeció a Trump āla oportunidad de reducir el gasto superfluoā.
āLa misión del @DOGE se fortalecerĆ” con el tiempo a medida que se convierta en una forma de vida en todo el gobiernoā, aƱadió, refiriĆ©ndose a su equipo del Departamento de Eficiencia Gubernamental.
La huella del multimillonario aĆŗn se siente con firmeza en el Washington oficial a travĆ©s de ese esfuerzo, una iniciativa para recortar drĆ”sticamente el gasto, la cual ha desplegado personal por todo el gobierno. Pero Musk ha dicho en los Ćŗltimos dĆas que pasó demasiado tiempo enfocado en la polĆtica, y ha lamentado el daƱo reputacional que Ć©l y sus empresas han sufrido a causa de su trabajo en el gobierno de Trump.
āCreo que probablemente dediquĆ© demasiado tiempo a la polĆticaā, dijo Musk en una entrevista concedida esta semana a Ars Technica, un medio de noticias sobre tecnologĆa.
Y aƱadió: āSe trató simplemente de una asignación de tiempo relativa que probablemente fue demasiado alta en la parte del gobierno, y la he reducido significativamente en las Ćŗltimas semanasā.
TambiĆ©n arremetió contra los aliados de Trump en el Congreso, al declarar a CBS News que estaba ādecepcionadoā por el proyecto de ley de polĆtica interior que el presidente defendió y la CĆ”mara aprobó la semana pasada.
āMe decepcionó ver el proyecto de ley de gasto masivo, francamente, que aumenta el dĆ©ficit presupuestario, no solo lo disminuye, y socava el trabajo que hace el equipo del DOGEā, dijo.
Cuando los periodistas le preguntaron el miĆ©rcoles sobre las crĆticas de Musk, Trump no quiso responder directamente. Defendió el proyecto de ley, aunque reconoció que habĆa aspectos que no le gustaban, y alabó los esfuerzos de los republicanos por sacarlo adelante. No pronunció ni una sola vez el nombre de Musk.
Sin embargo, Stephen Miller, jefe adjunto de gabinete de polĆtica de la Casa Blanca, replicó a Musk en las redes sociales sin mencionar su nombre. Miller afirmó que el proyecto de ley reducirĆa el dĆ©ficit a pesar de que mĆŗltiples anĆ”lisis independientes afirman lo contrario y seƱaló que los recortes efectuados por el equipo de Musk no estaban relacionados con el proyecto de ley de gastos.
Antes del viaje de Trump a Medio Oriente este mes, Musk se opuso a un acuerdo en marcha entre una empresa rival de IA y los Emiratos Ćrabes Unidos para construir un enorme centro de datos en Abu Dabi, segĆŗn un funcionario de la Casa Blanca.
Musk se quejó con David Sacks, asesor del presidente en materia de IA, y otros funcionarios de la Casa Blanca sobre el proyecto de Abu Dabi que involucra a OpenAI, una organización que fundó con Sam Altman, con quien se ha enemistado desde entonces, segĆŗn el funcionario. TambiĆ©n expresó su preocupación por la equidad en general para otras empresas de IA, e intentó que su propia empresa, xAI, se incluyera en el acuerdo, aunque finalmente no fue asĆ. El Wall Street Journal informó por primera vez de la oposición de Musk.
El acuerdo con OpenAI siguió a un plan establecido entre el gobierno de Trump y los Emiratos Ćrabes Unidos para construir un campus de IA en Abu Dabi.
Musk acompañó al presidente en su viaje por Medio Oriente, pero Trump apenas mencionó su nombre pĆŗblicamente. Y los funcionarios extranjeros del Golfo parecĆan mĆ”s interesados en buscar al enviado especial de Trump a la región, Steve Witkoff, que en Musk.
El 14 de mayo, mientras una multitud de partidarios adinerados de Trump se arremolinaba en el Palacio Lusail de Catar antes de una cena con el emir, Musk esperaba junto con todos los demÔs en la fila de recepción para estrechar la mano de Trump.
El papel secundario del multimillonario supone un cambio drÔstico respecto a su predominio al principio de la nueva gestión.
En febrero, Musk saltó al escenario en la Conferencia de Acción PolĆtica Conservadora con una motosierra y comentó ālo fĆ”cilā que era āahorrar miles de millones de dólares a veces en, en una horaā.
āSĆ, es una locuraā, dijo.
El equipo DOGE de Musk ha inflado repetidamente sus esfuerzos de ahorro de costos, al publicar a veces afirmaciones erróneas sobre la finalización de contratos federales que luego han borrado.
Esta semana, Musk declaró a The Washington Post que era una ābatalla cuesta arriba intentar mejorar las cosas en Washingtonā.
Los recortes que querĆa implementar eran mucho mĆ”s difĆciles de lo que esperaba y su falta de interĆ©s por aprender mĆ”s sobre la burocracia que consideraba tóxica obstaculizó sus esfuerzos, sobre todo en el Capitolio, segĆŗn personas familiarizadas con su trabajo, que hablaron bajo condición de anonimato para describir las discusiones internas.
Durante los primeros 90 dĆas del gobierno, algunos asesores de la Casa Blanca sintieron que el gobierno era esencialmente presa de Musk y de su voluntad de utilizar X para atacar a la gente que le desagradaba. Musk tenĆa una lĆnea directa con Trump y fomentó medidas a las que se oponĆan algunos funcionarios del gabinete, como obligar a los empleados federales a enviar un correo electrónico semanal con sus cinco logros principales o arriesgarse al despido. (Este requisito se suprimió esta semana para los empleados civiles del Departamento de Defensa).
Musk mantuvo a Trump fascinado, hasta que algunos titulares sobre el trabajo del DOGE āy las quejas de legisladores y funcionarios del gabineteā se volvieron difĆciles de ignorar. La ruptura para el presidente, segĆŗn personas al tanto de su manera de pensar, se produjo cuando se enteró por un reportaje del New York Times de que Musk estaba a punto de recibir una delicada sesión informativa sobre China en el PentĆ”gono. Trump, quien habĆa evitado repetidamente las preguntas sobre los posibles conflictos de intereses de Musk, se mostró descontento, dijeron esas personas.
La propia desilusión de Musk con la polĆtica nacional se remonta a dos acontecimientos recientes, segĆŗn personas cercanas a Ć©l: sus frustraciones con el rĆ©gimen arancelario del presidente y los aproximadamente 25 millones de dólares que gastó apoyando a un candidato que acabó perdiendo una candidatura judicial en Wisconsin, reseƱa el portal web nytimes.
En cuanto a sus esfuerzos por trastocar la burocracia, Musk insistió el mes pasado en que es posible alcanzar su objetivo de recortar 1 billón de dólares del gasto federal, āpero hay un largo camino por recorrer y, ya saben, es realmente difĆcilā.
āSe trata mĆ”s o menos de ĀæcuĆ”nto dolor, saben, estĆ”n dispuestos a soportar el gabinete y el Congreso?ā, dijo a los periodistas en la Casa Blanca. āPorque puede hacerse, pero requiere hacer frente a muchas quejasā.
Dijo que quedaba por ver si habĆa āsuficiente voluntad polĆtica en el Congreso y en otras partes para hacerlo realmenteā.
Aun asĆ, varios de los ayudantes mĆ”s destacados de Musk parecen estar bien instalados en sus nuevas funciones gubernamentales. Steve Davis, un ejecutivo leal que ha trabajado para Musk en muchas de sus empresas, incluida X, sigue siendo una presencia habitual en la Administración General de Servicios, segĆŗn dos personas que han interactuado con Ć©l recientemente. Antonio Gracias, el inversor multimillonario, ha pasado de dirigir el equipo del DOGE en la Administración del Seguro Social a desempeƱar un papel en la bĆŗsqueda en las bases de datos federales para tratar de identificar casos de ciudadanos extranjeros que votan ilegalmente, segĆŗn personas familiarizadas con esta labor.
El mes pasado, Musk dijo a los inversores y analistas de Tesla que reducirĆa su tiempo dedicado a asuntos gubernamentales a āuno o dos dĆas a la semanaā y, desde entonces ha hecho un esfuerzo concertado por demostrar que estĆ” de nuevo comprometido en sus empresas.
āVuelvo a pasar las 24 horas del dĆa en el trabajoā, publicó en X Musk, el director ejecutivo de Tesla y SpaceX, el sĆ”bado. āDebo estar supercentrado en X/xAI y Teslaā.
El martes, SpaceX realizó un vuelo de prueba de Starship, el cohete que Musk espera que algĆŗn dĆa lleve seres humanos a Marte. El vehĆculo despegó con Ć©xito, pero tuvo una fuga a mitad de camino y finalmente explotó. En X, Musk calificó el lanzamiento de āgran mejoraā, pero aplazó una charla que tenĆa previsto dar sobre āel plan de SpaceX para hacer la vida multiplanetariaā.
No obstante, dejó claro que asistió al lanzamiento y estaba enfocado en SpaceX. Compartió entrevistas con influentes y medios de comunicación, ademĆ”s de un video en el que aparecĆa sentado en un centro de control con una camiseta que decĆa āOcupa Marteā.